Conoce acerca del Síndrome del Trabajador Quemado
El Burn Out es una patología severa, que está relacionada con el lugar de trabajo y el ritmo en el que se lo lleva. Es un trastorno emocional provocado por el trabajo y conlleva graves consecuencias físicas y psicológicas cuando el fenómeno se somatiza. La ansiedad o la depresión y dan origen a numerosos accidentes laborales.
A veces se puede experimentar astenia y agitación al mismo tiempo (tics nerviosos, temblor de manos); palpitaciones; taquicardia y pinchazos en el pecho; aumento de la tensión arterial; dolores musculares, sobre todo en la zona lumbar; cefaleas; problemas digestivos; trastornos del sueño e inapetencia sexual.
Síntomas que terminan invadiendo la vida social y familiar del afectado, que opta por aislarse y quedarse solo.
El problema surge cuando los horarios no les permiten solucionar todo lo que quieren o que habían idealizado la profesión y la realidad no se parece en nada a lo que había imaginado que era.
Los bajos sueldos, los escasos incentivos profesionales o la pérdida de prestigio social son también factores que propician la aparición del Burn Out.
Los síntomas comienzan a aparecer cuando, después de estar sometidos a un esfuerzo laboral crónico y desproporcionado, el cuerpo reacciona como si hubiera agotado todas sus reservas de energía. Los científicos han identificado que detrás de esta sensación hay una importante hipoactividad de las glándulas adrenales. Estos órganos, ubicados en la parte superior de los riñones, se ocupan de producir hormonas para afrontar situaciones de emergencia (adrenalina), movilizar los nutrientes y garantizar que todos los órganos disponen de la cantidad de azúcar que necesitan para funcionar (cortisol) y mantener la presión sanguínea (aldosterona), entre otras funcionas. Eso explica por qué cuando las glándulas están exhaustas, los músculos se fatigan, se pierden reflejos, las digestiones son lentas y pesadas, y el trabajador «quemado» se convierte en blanco perfecto de virus y bacterias debido a que su sistema inmune no responde adecuadamente.
La debilidad de las glándulas adrenales aumenta aún más si el individuo ingiere pocas proteínas y muchos azúcares, o consume cafeína y alcohol en ingentes cantidades.
Según los expertos, este problema ha alcanzado ya dimensiones de epidemia. Se estima que millones de trabajadores padecen burnout. Entre los más afectados se encuentran psicoterapeutas, médicos, enfermeros y personal de rescate, que sufren lo que se conoce como «desgaste por empatía», especialmente si trabajan con niños.
Para prevenir el burnout los expertos coinciden en recomendar hacer pequeñas pausas a lo largo de la jornada laboral y dedicar un tiempo mínimo semanal al ocio para alejarnos de todo y «recargar las pilas».